lunes, 20 de agosto de 2012

Learning to fly...

Con miedo estiré la mano, como en las películas podrían ver mis dedos temblando. Ya me había rechazado una vez pero esta vez las cosas eran distintas, podía sentir que ella me miraba diferente y bueno: me arriesgué. 
No me equivoqué, no esta vez, y cuando sentí su mano tomando la mía mi corazón palpitó fuertemente, débil ante la emoción solo mire el enorme árbol que adornaba la plaza obelisco. 
Cerca de navidad y se daba el milagro, el milagro era que ella, la que tanto había querido desde mis  15 años respondiera a mi interés. Necesitaba tiempo para procesar la información, tiempo para pensar en una estrategia y tiempo para decidir si dejaría que me rompiera el corazón, otra vez. 

Corté la noche con las ganancias que tenía y la llevé a su casa, no le toqué el tema: pero había algo en su mirada.

Incrédulo manejé con la música a todo volumen los veinte kilometros que me llevaban a casa y recosté la cabeza analizando lo que había pasado, pero mas quería entender el significado de sus gestos, el cambio en su mirada y por supuesto el por qué no me había rechazado.
Algo estaba cambiando en ella, pero qué era? y qué tan duradero era el cambio? valía la pena el riesgo?  preguntas sin respuesta.

***

Estaba cumpliendo 16 años cuando decidi encarar mi miedo a decirle la verdad. Una verdad que suponia ella sabía plenamente, pero que yo aún no había confesado. Era su mejor amigo pero desde hace mucho yo estaba enamorado sin remedio de ella. Tenía mis dudas de que fuera recíproco, aunque a veces parecía interesada no terminaba de ver lo que confirmaría mis deseos.
Esa noche no quise esperar mas, dueño del mundo como se siente a esta edad, la tome del brazo y le dije que queria hablarle. La mire a los ojos y le dije que era yo el que estaba enamorado de ella. Descubriendo así aquella famosa falacia de que era un amigo en comun el que quería conocerla.
Ella me miró con un gesto incomodo, como queriendo retroceder el tiempo, bajó la mirada y sin volver a encontrarse conmigo me dijo: Hay que olvidarse de eso. Se dio la vuelta y se fue. Yo me quede clavado en el garage de mi casa, mudo e incapaz de entender lo que sucedería ahora.

Tiempo despues estaba escuchando la canción kumbala de maldita vecindad... ahora recuerdo claramente la frase: en la pista todo es musica y pasion...

***

Fuimos al cine de las americas, no recuerdo la película que estábamos viendo, pero estaba nervioso nuevamente. Estaba apunto de hacer un movimiento clave en este ajedrez, si mi estrategia y la lectura que hice de ella eran las correctas esta vez no me quedaría congelado en el garage de mi casa.
La película siguió y yo me acerqué a besarla, por un segundo contemplé su gesto de aceptación y mi corazón parecía brincar dentro del pecho. El beso fue breve, brevísimo pero el paso era cualitativamente increíble. Cada quien regreso a su sillón y miró nuevamente a la pantalla, ni una palabra, yo sonreía dentro de mi pero me mantenía tranquilo en aparencia.
Volteé a verla para ver su reacción y nunca imaginé lo que vi, no era posible!! Estaba llorando. Lloraba, claramente perturbada por lo que habíamos hecho, algo estaba mal, muy mal. Pude recrear lo que me costaría superar este fracaso, pero era imposible! todo estaba bien hace un minuto! pero ya no lo estaba.
El problema era que seguía siendo su amigo, su mejor amigo y yo no podia ser mas que eso. Aqui es donde los hombres nos separamos de ellas, nosotros no tenemos categorías fijas. Todas, con pocas excepciones, pueden llegar a ser tu pareja. Ellas tienen estos cajones fijos o escaleras como lei en internet, en las que ponen a sus conocidos. Un amigo esta con otros amigos compartiendo el mismo cajón y los novios o futuros prospectos tienen su propio cajón y nooo! no se mezclan! NUNCA.
Aquí estaba yo poniendo en jaque a la señorita, cuestionando la lógica y la necesidad de tener estos cajones. Nada que hacer, la etiqueta estaba puesta y no se podía cambiar.

Dos semanas despues estábamos en el cine y la historia se repitio con todo y las lágrimas, pero esta vez sería Jaque mate o me retiraría de la partida.

Un par de horas después manejaba con lágrimas en los ojos y no podía creer que volvía a encarar su rechazo, que me volvía a equivocar con ella.

***

Alguien me llamaba, llegué al teléfono y era ella. Contuve la emoción y me porte frio porque no era gracia lo de estar en este juego. Ella tratando de suavizar mi resequedad me sacaba conversación, nada. Al final me dijo: necesito hablarte, por favor juntémonos. A regaña dientes acepte ir a ver cuál era el veredicto final de este juego. Yo no tenía la más mínima expectativa, me imaginé otro diálogo de disculpas improductivo.

Sabía que yo no tenía mucha paciencia y fue al punto que quería decirme: Me pasé el fin de semana llorando por lo que habia pasado con nosotros, mi Mamá se acercó para preguntarme qué tenia, al contarle me contestó: Pero si realmente no lo querés por qué estas llorando por él?. Asi que estoy aqui para decirte que estoy dispuesta a que probemos, quiero ser tu novia como tu me propusiste.

Frio otra vez y luego incrédulo, las cosas estaban cambiando tan rápido que no podia abrazar la felicidad tan fácilmente. La cuestioné más para ver que tan sólida era su nueva resolución.  Nada, no me la quise tragar tan fácil y pensé que era mejor ser cauteloso con el asunto.

Unos dias despues fuimos al cine a ver la pelicula Bichos de disney, esta vez ella me tomó la mano mientras entramos al cine, estaba relajada y yo no dejaba de estar nervioso.  La voltie a ver y ella me miro de vuelta, la historia se repetia, la bese por tercera vez y esta vez ella tambien estaba nerviosa. Lo se porque sentia su pulso. Seguimos viendo la pelicula y voltie a verla nervioso, esta vez me vio de vuelta y se rio. Sus ojos brillaron igual que los mios.

***

En mi casa unos dias despues de la emoción me cuestionaba lo que estaba pasando, no era posible que estuviera viviendo esto. Pero al recordar lo que había vivido en los últimos dias me recorrió un escalofrio de miedo, los recuerdos del dolor de perderla estaban ahi, las veces que lloré y las veces que quise regresar el tiempo para sentirme menos mierda.
Dudaba de si duraríamos, si ella se mantendría en esa postura y si esto era un sueño cuánto tiempo lo duraria? la conocía y sabía que podía variar sustantivamente en cuanto a sus decisiones amorosas. Era inteligente correrme el riesgo de enamorarme otra vez y de des-enamorarme después? valía la pena sufrirla por ella?

Recordé entonces lo que tanto deseaba aquella noche de mi cumpleaños que me quedé frio. Una oportunidad. Yo sabia cuanto la quería, yo sabia lo que podia hacer por ella y necesitaba poder demostrárselo y demostrármelo. Como un rayo recordé que ya una vez la había superado y entonces el miedo no tuvo poder para argumentar nada, no era imposible sobreponerme. La vida no se acababa sin ella.  No podia ser tan mezquino de entrar al juego a medias, no podia evitar zambullirme en la relación. No habia otro camino y entonces tomé una determinación: No sabia si duraría un mes o una semana pero decidí marcar con sangre si fuera necesario cada dia que fuéramos novios. Queria que si fracasabamos ella tuviera que comparar a cualquier otro conmigo, como yo lo hacia con ella. Actue en consecuencia: en un mes apliqué todo lo que había aprendido e inventé cosas nuevas, no había mas: era ahora o nunca.
Duramos casi 7 años de novios.





















Ahora llevamos 7 años como esposos y tenemos una hija, la historia aún la seguimos escribiendo...


1 comentario:

  1. :') que lindo!! esa foto de ustedes es bella! que mirada de amor por Dios!! Son una pareja linda en todos los sentidos. Cómo dirían los gringos "Made in heaven". Me encantó este post, que buen regreso don MauKu.

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